Para proceder a este sistema de blanqueado dental se tienen que toman unos moldes de la boca del paciente. Posteriormente, se confeccionan en laboratorio unas férulas (de estructura plástica flexible) que se amoldan a la forma de los dientes.
Una de las férulas se usará para los dientes superiores. La otra para los dientes inferiores. Son transparentes, no molestan en absoluto y se puede hablar con ellas puestas.
Para llevar a cabo el tratamiento, se entregan al paciente las dos férulas y un kit de blanqueamiento que contiene jeringas con el producto blanqueador. Es conveniente conservarlo en nevera. La férula rellena con gel se aplicará durante el período que le aconsejemos.